La Guajira siempre ha contado en su historia con mujeres de gran valía que con trabajo tesonero, de manera constante, con disciplina en sus labores y el amor al campo han descollado de manera brillante en su devenir y en su porvenir. Ejemplo de estas mujeres que han sido consideradas como unas heroínas en su lucha diaria las encontramos irrigadas a lo largo y ancho de nuestro Departamento.
Villanueva, sobre todo en décadas pasadas, se convirtió en un semillero de campesinas que a punta de lucha y esfuerzo lograron en primer lugar sacar adelante de manera exitosa a sus familias y se convirtieron en estandartes de este pue blo laborioso donde el campo agrícola y ganadero ha sido la simiente de su esplendor y de su gloria.
En esta columna llena de nostalgia y dolor quiero destacar y hacer honor a una gran matrona del barrio El Arroyito, que a través de lustros se convirtió en una campesina de altos quilates, que hizo honor a una raza y a una generación como lo fue su madre y su familia en general. Ella es Perfecta Brito, fallecida en este viernes 18 de febrero, y quien desde muy joven quedó viuda y no fue obstáculo para demostrar toda su sapiencia en el sector agropecuario, que aprendió de su esposo, el siempre recordado José Rumbo.
Perfecta, sin proponérselo, hizo camino al andar y con catorce hijos a cuestas los sacó adelante y no solo eso, les enseñó de manera tesonera su amor por el campo. Ella fue de esos estandartes que con 91 años hizo un buen recorrido y dio un buen ejemplo de lo que es el trabajo en el campo, de manera proba y transparente y ante todo con la misma humildad y la misma sencillez se hizo sentir entre los suyos y en especial en su barrio querido.
Ejemplo para las nuevas generaciones. Heroína sin lugar a dudas para sus hijos. Lo que ella plasmó con sus manos, la mayoría de sus hijos han seguido ese buen ejemplo, de ser no solo una gran campesina, sino una gran empresaria en el campo donde dio cátedra con su dedicación y experiencia.
José Luis, el mayor, fue el primero; William, el segundo, siguió sus pasos y quien la recibe allá en el cielo; Léiber se ha dedicado de lleno a ese trabajo tesonero; Wilder, quien ha descollado de manera exitosa, no solo en el campo agrícola y ganadero, sino en la política, donde ha representa de manera exitosa no solo a su familia, sino al pueblo de Villanueva como concejal por tres periodos y hoy lleva la bandera de los afro en esta sección del país, así también como Genibaldo ‘El Negro’; Everth y Afranio, el menor.
Las mujeres, también trabajadoras e incansables como Yamina, Cilia, Eliana, Rosina, Melvis, Osmaire y Esneida, que con orgullo levantan la frente por la grandeza de su madre y el ejemplo que les dio en vida.
Con su partida del mundo terrenal en este viernes 18 de febrero, la lloran sus hijos, sus nietos, así como sus vecinos del barrio de ella y del de nosotros, El Arroyito.
‘Perfe’ fue una gran vecina, un ser humano que se ganó el cariño del pueblo villanuevero por sus buenas acciones, su capacidad de servicio y su humanismo gratificante. Yo puedo dar fe de ello, que en los momentos más difíciles.
en nuestra niñez siempre estuvo ahí apoyando a esa abuelita querida que nos crió con lucha y esfuerzo en el mismo barrio El Arroyito, y que siempre encontró en ‘Perfe’ una amiga incondicional y una vecina gratificante en el amor al prójimo.
¡Qué ejemplo para las nuevas generaciones, de estas matronas que no volverán en los tiempos presentes!
Dios le concedió tantas bendiciones en su periplo terrenal a esta matrona villanuevera, quien cumplió a cabalidad su ciclo en esta tierra con tanta nobleza y señorío que nos deja con su partida recuerdos imborrables de luchas y esfuerzos en la crianza de sus hijos, como una vecina ejemplar y un matrona singular en todo su recorrido, pero ante todo, en una campesina fuera de serie.
Ahora descansa en paz ‘Perfe’, como siempre te decíamos con cariño.