Según Wikipedia, la metástasis (del griego metastatis – mudarse de lugar o transferencia), es el proceso de propagación de un foco canceroso a un órgano distinto de aquel en que se inició. Ocurre generalmente por vía sanguínea o linfática. Aproximadamente el 98% de las muertes por cánceres no detectados, se deben a la metastatización de estos. En realidad, aunque es la más conocida, la metástasis no se limita solo a la propagación de células cancerosas, sino que se habla de metástasis cuando un émbolo desarrolla nuevamente el mismo proceso de origen (cáncer, infecciones) en el lugar donde se produce la embolia.
Así como ocurre con el cuerpo humano, cuando se da inicio a un tumor que inicialmente es benigno pero si no se toman las medidas ocupacionales indicadas por la medicina, este cuerpo termina convirtiéndose en un tumor maligno y es cuando se da inicio a las quimioterapias con el fin de atacar a las células malignas que se encuentran enquistadas en este mal y luego viene lo peor, cuando el mismo cuerpo es invadido por las células cancerígenas y se genera una metástasis y luego viene como consecuencia la muerte de la persona.
De igual manera a nuestro departamento le ha venido ocurriendo a través de los años la invasión de unos males seculares que a tiempo no se les colocó la debida contra pisa es decir no se previó a tiempo para que estos males seculares continuaran de forma arrolladora y que hoy hicieron metástasis en La Guajira y por ello se encuentra hoy en cuidados intensivos y es la hora que no se le han aplicado las quimioterapias del caso. La Guajira hoy se encuentra al vaivén de las olas y de los cambios que predicen un cataclismo desde el punto de vista financiero y que tendría consecuencias catastróficas sociales en el corto tiempo. Gracias a Dios se le aplicó la primera quimioterapia, aunque la metástasis continúa haciendo de las suyas.
Analicemos. La Guajira hoy tiene un pasivo prestacional de la salud por el orden de los 200 mil millones de pesos y que podría recuperarse con el documento red hospitalario que aprobó el Ministerio de la Salud y que no ha dado las soluciones del caso que eran en parte basadas en el cierre de varios hospitales como el de La Jagua del Pilar, Urumita y El Molino para tomar como centro de primer orden a Villanueva, Distracción para depender de Fonseca, Hatonuevo y Albania para depender de Maicao, Dibulla para depender de Riohacha y que se convertirían en centros de salud pero políticamente este tema lo han manejado.
El famoso empréstito internacional con el banco mundial, que fue un exabrupto para la economía guajira en el momento en que se hizo, en el mandato de José Luis González Crespo por el orden de los 90 millones de dólares y que no se ha manejado de manera eficiente, primero se perdieron los dos años de gracia, lo que se previa sucedió como ha sido la trepada del dólar lo que le ha generado al departamento pago por intereses por el orden de los 5 mil millones de pesos anuales. Hoy existe un saldo a favor de La Guajira para ejecutar por menos de 30 millones de dólares. Sumado a esto el recorte de regalías directas por la nueva ley de regalías lo que ha impactado de manera negativa la economía de nuestro departamento. Se invirtieron 650 mil millones de pesos en la construcción de la primera etapa de la represa del ranchería, donde La Guajira aportó 65 mil millones de pesos. ¿Y qué ha pasado? Este megaproyecto se ha convertido en el mayor elefante blanco de Colombia y para terminarlo se necesitan 800 mil millones de pesos.
Y este impacto ha afectado tanto el presupuesto del departamento que 650 mil millones que era lo aforado, hoy está en 450 mil millones, con este panorama sombrío ¿qué nos queda? Aunque difícil sea expresarlo, el único camino que tuvo La Guajira fue acogerse a la ley 550 como en efecto ha sucedido. Podemos afirmar que fue la primera quimioterapia que el gobernador Nemesio Roys le ha aplicado para atacar la metástasis financiera del departamento.