La conducta del ser humano es uno de los campos fundamentales o al menos el más visible y menos tolerado cuando la tendencia es hacia la actividad, donde se pueden manifestar los conflictos emocionales de la niñez. Los resultados en la adultez nos demuestran que ciertos comportamientos ilegales se han naturalizado tanto que no resultan graves para el común de la gente; en nuestra idiosincrasia: robar, sobornar o conducir en estado de embriaguez, despojan al individuo de su carácter criminal; muchos creen que, lo malo no es violar la ley sino dejarse pillar.
Con este comportamiento se percibe que puede tratarse de un proceso de socialización distinto que tiene que ver con el respeto de la norma y con el respeto de lo público, de lo que es común, no es algo folclórico, como muchas veces se dice, o se quiere mostrar, es algo que se expresa en el folclor, en la idiosincrasia, pero que tiene un fondo mucho más profundo.
El mal comportamiento protagonizado por hinchas colombianos en Miami, por individuos de todas las clases sociales, a las afueras del estadio Hard Rock, no solo empañó lo que debía ser una fiesta del fútbol, sino que también puso en evidencia una lamentable faceta de nuestra cultura, lo que genera una pena ajena a quienes vimos, como el mundo entero lo vio a través de las transmisiones, cómo somos; una de las grandes conclusiones lo resumimos así por lo que estamos vendiendo; dime de dónde vienes y te diré cómo eres.
Cuando en la niñez detectamos trastornos en conductas, éstas, si no son tratadas a tiempo pueden llegar a presentar trastornos de personalidad cuando se es adulto, particularmente el trastorno de personalidad antisocial como los que vimos en vivo y en directo por varios canales. A medida que los comportamientos empeoran, estos individuos también pueden tener problemas con el consumo de drogas empeorando su comportamiento antisocial; esto nos puede estar mostrando, que estamos frente un déficit cultural.
Una consecuencia detectada en la niñez, es lo que sucede en forma inmediata después de una conducta; las consecuencias pueden ser tanto positivas como negativas, las consecuencias positivas le demuestran a su hijo que ha hecho algo que a usted le agrada; cuando usted usa esa consecuencia positiva, es más probable que su hijo repita esa conducta. Las consecuencias negativas le hacen saber a su hijo que a usted no le agrada lo que ha hecho, es menos probable que el niño repita esa conducta si usa una consecuencia negativa, a las consecuencias negativas también se les llama medidas disciplinarias en estas épocas modernas, en otras épocas, se corregían a correazos y este método utilizado en el pasado por muchos padres de familia, salvo que muchos hoy fuesen antisociales.
Mientras las autoridades estadounidenses actuaron con eficacia y sin titubeos, nuestras propias instituciones a menudo se muestran laxas y permisivas ante comportamientos similares en los estadios colombianos y en otros escenarios de la vida. Este contraste no solo es evidente, sino también vergonzoso, esos procesos nos han llevado a que el hecho de que no hubiese tanta presencia de la autoridad propició ese tipo de conductas.
Es urgente que como sociedad y desde el hogar dejemos, de normalizar y tolerar estas actitudes, no podemos seguir formando colombianos que, con su comportamiento, nos avergüenzan internacionalmente y deterioran la convivencia en nuestro propio país; necesitamos un cambio cultural profundo que abarque tanto la educación como el control riguroso. Las vivencias de la infancia determinan nuestra vida adulta, muchas experiencias que han tenido lugar durante los primeros años de vida, tienen efectos en la edad adulta.
El 20 de julio Día de la Independencia es, para la mayoría de los colombianos, un momento para levantar la cabeza y recordar, como bien lo dice la canción, lo orgullosos que nos sentimos de ser buenos colombianos; sin embargo, este sentimiento no es único de este día, pues el patriotismo se debe respirar en el ambiente del país todos los días y así lo debemos mostrar cuando estamos dentro y fuera de nuestra patria.