La Iglesia colombiana ha entregado información por abuso sexual a niños con el propósito de contribuir a la justicia civil.
Al finalizar la última Asamblea Plenaria del Episcopado colombiano en Bogotá, que se llevó a cabo del 6 al 10 de febrero de 2022, los líderes religiosos pidieron perdón a quienes han sufrido estos casos tan atroces por miembros del clero y a sus familiares. Monseñor Luis José Rueda Aparicio, presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, resaltó que todo caso de abuso sexual es considerado un pecado grave, un crimen, un delito.
Señaló que el acto de perdón “es el reconocimiento de la fragilidad y nos hemos propuesto colaborar desde el comienzo con la justicia civil para que pueda tener los datos de los procesos y todos los elementos recibidos de la iglesia y pueda determinar casos de abusos que tengan su respectiva condena”.
Mons. Luis José Rueda, también arzobispo de Bogotá, asegura que la Iglesia se hace responsable con firmeza de la atención a las víctimas y sus familiares. Afirma, además, que mantendrán su compromiso para que en cada caso se haga justicia y ejecuten los protocolos de prevención para posibles futuros casos. Lo anterior, con el fin de hacer de las instituciones eclesiales un ambiente seguro.
Durante la asamblea, el Episcopado analizó el documento ‘Líneas guía para la cultura del cuidado’ en su versión 114. Según el presidente de la conferencia, tiene el objetivo de doblegar los esfuerzos “para hacer de nuestra Iglesia un hogar seguro para nuestros niños, niñas, adolescentes, jóvenes y personas vulnerables”.
La Iglesia no posee una cifra de abusos cometidos por sacerdotes, lo que según el Obispo Luis José Rueda se considera una irresponsabilidad.
Mientras que Monseñor Luis Manuel Alí, secretario general de la Conferencia Episcopal, mencionó: “es necesario hacer concreto ese gesto de perdón en cada uno de los casos; estamos muy conscientes que eso es muy importante para las víctimas y fundamental en el proceso de reparación integral”.