Un grave caso de maltrato infantil fue denunciado en las últimas horas en el Valle del Cauca. Un niño tuvo que ser atendido por médicos tras ser quemado, al parecer por su propia madre.
El menor sufrió quemaduras de tercer grado en su rostro, tórax, cuello y brazo.
La Policía reportó que a la víctima le rociaron alcohol encima y luego le prendieron fuego. Al parecer la madre decidió quemar vivo al niño como castigo por no hacerle caso.
“Rechazamos contundentemente estas conductas que atentan contra la integridad de nuestros niños, niñas y jóvenes. En esta ocasión, al parecer, su progenitora es quien ocasiona las lesiones al menor de edad”, dijo el coronel Jorge Urquijo, comandante de la Policía del Valle del Cauca.