Carlos Carrillo, director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd), anunció que los 80 carrotanques destinados a abastecer de agua a las comunidades de La Guajira finalmente entrarán en operación. Los vehículos, adquiridos en enero de 2024, permanecieron inutilizados en una base militar de Uribia debido a la falta de seguros, en medio de acusaciones de corrupción y negligencia.
«El viacrucis terminó», expresó Carrillo al revelar que los carrotanques ya cuentan con pólizas todo riesgo. Según el funcionario, tras varios intentos fallidos y tensiones con el sector asegurador, se logró asegurar los vehículos mediante La Fiduciaria, entidad estatal.
“Después de demasiado sufrimiento, demasiado, debo decirlo, el viacrucis terminó. Aseguramos los carrotanques y hoy quiero anunciarle al país, que los 80 vehículos comprados con multimillonarios sobrecostos ya tienen póliza todo riesgo. Después de varios intentos, logramos que el sector asegurador amparara los vehículos que en cuestión de días serán puestos en operación”, aseguró.
El proceso para asegurar los carrotanques estuvo marcado por escándalos y costos adicionales. Carrillo señaló que las demoras obedecieron, en parte, al temor de quienes gestionaban los vehículos frente a posibles cuestionamientos por operar sin seguro, lo que habría agravado los ya existentes señalamientos de corrupción. «A los responsables de apropiarse de la Ungrd les dio miedo seguir operando sin las pólizas necesarias, lo que detuvo el proceso», afirmó.
El funcionario también desmintió que la falta de conductores fuera un obstáculo, calificando esa versión como una excusa creada por Sneyder Pinilla. «Conseguir 40 conductores en Colombia no es un reto. El verdadero problema siempre fueron los seguros», puntualizó.
La gestión para asegurar los carrotanques le costó al país 1.600 millones de pesos adicionales, «esa era la única opción para evitar que los carrotanques se quedaran ahí pudriéndose», explicó Carrillo.
El millonario contrato para la adquisición de estos vehículos fue el centro de un esquema de corrupción que implicó a al menos 15 funcionarios y que resultó en la destitución del exdirector de la Ungrd, Olmedo López.
