En una operación en aguas del océano Pacífico, la Armada de Colombia incautó 1,3 toneladas de cocaína y 208 aletas de tiburón que eran transportadas en una embarcación sospechosa. En el procedimiento, realizado a 70 millas náuticas de Tumaco, Nariño, fueron capturados dos ciudadanos colombianos y un ecuatoriano.
Según el capitán de corbeta Camilo Larrota, comandante de la Estación de Guardacostas de Buenaventura, la interdicción se llevó a cabo luego de que un buque de la Armada detectara una motonave con un comportamiento irregular. Ante esto, una Unidad de Reacción Rápida se dirigió al punto para inspeccionar la embarcación.
“A pesar de los intentos por escapar, las autoridades interceptaron la embarcación sospechosa y encontraron a bordo a tres individuos que transportaban 51 bultos con la sustancia ilícita”, detalló la Armada en un comunicado.
Durante el operativo, además del alcaloide, se encontraron equipos de comunicación y 208 aletas de tiburón, lo que sugiere un posible caso de tráfico ilegal de especies, una práctica que afecta gravemente a la biodiversidad marina.
Las difíciles condiciones climáticas en la zona provocaron fisuras en la estructura de la motonave, lo que ocasionó su hundimiento. Sin embargo, los tripulantes fueron rescatados y el material incautado se logró recuperar.
Finalmente, los tres capturados fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de la Nación, mientras que las aletas de tiburón fueron entregadas a la Corporación Autónoma Regional de Nariño (Corponariño), autoridad encargada de la protección ambiental en la región.
La Armada de Colombia reiteró su compromiso en la lucha contra el narcotráfico y el tráfico ilegal de especies, señalando que continuará con operativos de control para reforzar la seguridad marítima y combatir los delitos que afectan el ecosistema y la estabilidad del país.