El Papa Francisco permanece internado en el hospital Gemelli de Roma para continuar su tratamiento contra una bronquitis persistente. En un mensaje dirigido a los fieles, el pontífice expresó su gratitud por el cariño y las oraciones recibidas durante su recuperación. También agradeció la labor de los médicos y enfermeros que lo atienden, reconociendo su esfuerzo y dedicación en el cuidado de los pacientes.
Debido a su estado de salud, Francisco no pudo pronunciar el Ángelus dominical, aunque el Vaticano publicó el mensaje que tenía preparado. Tampoco pudo presidir la misa del Jubileo de la Cultura, un evento que reúne a artistas de todo el mundo, y cuya homilía fue leída por el cardenal José Tolentino de Mendonça. En su mensaje, el Papa destacó el papel del arte como un medio de unión entre los pueblos y un canal para la paz. También reiteró su llamado a la comunidad internacional a seguir orando por la paz en zonas de conflicto como Ucrania, Palestina, Israel, Myanmar, Kivu y Sudán.
El Vaticano informó que los médicos han recomendado reposo absoluto para facilitar su recuperación y que se han realizado ajustes en su tratamiento tras nuevos análisis. Aunque los últimos exámenes han mostrado una mejoría en algunos valores, el pontífice seguirá bajo observación hasta que su estado de salud permita retomar su agenda habitual. Esta es la cuarta vez que Francisco es hospitalizado en el Gemelli, centro médico donde ya ha recibido atención en otras ocasiones por problemas respiratorios y otras afecciones. En noviembre de 2023, su salud le impidió asistir a la cumbre climática COP28 en Dubái, y en marzo de ese mismo año pasó tres días internado por una infección pulmonar.
A pesar de su hospitalización, el Papa ha tratado de mantenerse cercano a los fieles mediante mensajes escritos y sigue atento a los compromisos de la Iglesia. Sin embargo, su equipo médico y el Vaticano han priorizado su recuperación, evitando esfuerzos que puedan agravar su condición. Se espera que en los próximos días haya una actualización sobre su estado de salud y su posible regreso a las actividades regulares en el Vaticano.