Un semisumergible fue interceptado en medio de un operativo efectuado en las costas de Cangas, localidad de Galicia, cerca de la frontera con Portugal, en donde las autoridades lograron incautar más de 3.000 kilos de cocaína que llegaba a España y dejó como consecuencia dos colombianos capturados.
Mientras tanto, la policía, la Guardia Civil y las aduanas españolas seguían investigando el caso este lunes.
De acuerdo a las autoridades, en los últimos meses el modus operandi se hace más frecuente en el continente americano, donde los cárteles colombianos transportan la droga en submarinos más o menos sofisticados para llevarla a México, y de allí introducirla en Estados Unidos.
Cabe recordar que en el pasado mes de septiembre, un submarino casero fue incautado con más de 5 toneladas a bordo y fue interceptado por la guardia costera de Estados Unidos en el océano Pacífico, con la ayuda de la Armada colombiana.