Todos los años, el segundo domingo de Pascua, la iglesia católica universal celebra la fiesta a Jesús de La Divina Misericordia, establecida el 23 de mayo del año 2000 por indicación del Papa Juan Pablo II. El objetivo de esta celebración es hacer llegar a las personas el mensaje de que Dios es Misericordioso y nos ama a todos.
En Fonseca, La Guajira, la parroquia Jesús de La Divina Misericordia celebra, ésta, su fiesta patronal, evento que atrae cada vez a un mayor número de feligreses, tanto de la comunidad como de pueblos vecinos, quienes participan con gran religiosidad y entusiasmo en cada una de las actividades que se realizan.
Ha sido tanto el auge que ha tomado esta fiesta en la Tierra de Cantores, que ya son consideradas las mejores de Colombia en honor a Jesús Misericordioso. Así lo han manifestado misioneros de la espiritualidad de la Misericordia que han recorrido el país y que al conocer las celebradas en Fonseca no han dudado en asegurar que en ninguna otra parte de Colombia han visto una festividad a la Misericordia Divina con las mismas características. También lo reconoció el Padre Ricardo Giraldo Múnera, asesor nacional de la Casa de La Misericordia, quien asistió a la celebración el año anterior y presidió la misa Mayor.
Y es que, bajo la dirección del Padre Alexander Torres Oñate, se ha establecido una programación con una serie de eventos, cuyo propósito es llevar a los fieles a cumplir el mensaje que Jesús nos ha comunicado por medio de Santa Faustina, donde se nos pide que tengamos plena confianza en la Misericordia de Dios y seamos misericordiosos con el prójimo a través de nuestras palabras, acciones y oraciones.
La celebración inicia con ‘La Entronización’, un recorrido por las calles de Fonseca con la imagen de Jesús Misericordioso, anunciando al pueblo la apertura de la fiesta. Ese día, también se lleva a cabo ‘La Carrerita’, que es el recibimiento de la Santísima Virgen María al Señor de la Misericordia, donde, los portadores del anda de la Virgen, en veloz carrera, para representar la alegría al conocer la noticia, van a encontrarse con nuestro Señor que ha resucitado. Adicionalmente, los feligreses portando globos rojos y azules, elevan a Dios peticiones por sus necesidades y oraciones por sus familiares difuntos. Luego en una corta procesión, la Virgen acompaña a Nuestro Señor de La Misericordia hasta el templo, para dar inicio a la fiesta.
En el marco de la celebración y con gran asistencia de la feligresía se realiza la novena; en estas eucaristías se ha instituido la ‘Semana de Jericó’ 7 días de oración, sanación y liberación, derribando muros.
Estas eucaristías, en las que la feligresía experimenta el gran poder del Espíritu Santo como fuente sanadora de sus enfermedades corporales y espirituales; son oficiadas por sacerdotes que vienen de diferentes partes de Colombia, a quienes Dios les ha regalados dones que ponen al servicio de los fieles que acuden cada día fervorosamente.
Como preparación a la gran fiesta, los fieles participan además en la jornada de confesión y el sábado, vísperas del domingo, asisten a la ‘Eucaristía del Perdón’, asisten los confesados y los que no han podido hacerlo por diversas circunstancias pero que quieren ganar indulgencias parciales. Los fieles llevan en la frente una cruz roja, señal de que somos pecadores y como dice el Señor: “…Aunque sus pecados sean como la escarlata, yo los haré tan blancos como la nieve. Aunque sean rojos como el carmesí, yo los haré tan blancos como la lana”. Isaías 1:18. También los asistentes llevan un cirio marcado con su nombre, que es puesto a los pies de Jesús para pedir perdón por sus pecados.
El domingo de la fiesta, a las 5:00 de la mañana se realiza la eucaristía de la misericordia por los encarcelados y sufragios por los difuntos, los fieles van vestidos de negro y en el caso de las mujeres deben portar un velo blanco en la cabeza.
Siguiendo lo revelado por Jesús a Santa Faustina, esta misa se hace teniendo en cuenta que la oración constituye un gran bien que puede ser ofrecido por aquellos que ya nos han dejado, y que esperan nuestra ayuda, porque ya no se pueden ayudar a sí mismos.
“Hoy, tráeme a las almas que están en la cárcel del Purgatorio y sumergelas en el abismo de mi misericordia. Que los torrentes de mi sangre refresquen el ardor del purgatorio. Todas estas almas son muy amadas por mí. Ellas cumplen con el justo castigo que se debe a mi justicia. Está en tu poder llevarles alivio. Haz uso de todas las indulgencias del tesoro de mi Iglesia y ofrecelas en su nombre…” (Diario de Santa Faustina #1226)
También se celebran eucaristías a las 6:00, 8:00 y a las 10:00 am la misa Mayor, que este año será presidida por Monseñor Oscar José Vélez Isaza, Obispo de la Diócesis de Valledupar.
En horas de la tarde, luego de la eucaristía de cierre de la ‘Jornada de Jericó’, se realiza la procesión con el Santo Patrono, en cuyo recorrido se encuentran los 15 altares mayores, ofrendados por los fieles devotos, que nos recuerdan las estaciones del Viacrucis y al Señor de la Misericordia que ha resucitado.
Este día las calles de Fonseca se visten con los colores azul y rojo, alusivos a la misericordia, los devotos adornan las calles con banderas, globos y ofrendan al Señor altares en el frente de sus casas, mostrando una gran devoción y amor por esta fiesta que ya es considerada la mejor de Colombia, tal como lo manifestó el Asesor Nacional de la Casa de La Misericordia, Padre Ricardo Giraldo Múnera.