De acuerdo al relato de la progenitora, Elibeth María Arrieta López, el menor le había pedido dinero para comprar billetes de juguete para distraerse. Posteriormente, Elis Saúl habría sostenido una discusión con su hermano menor de 5 años, ya que este le tenía parte de las denominaciones falsas y las rompió, situación que hizo enfurecer al niño mayor.
Tras esto, Elis Saúl se dirigió al patio de la casa, y luego de un tiempo la madre al notar el silencio, decidió percatarse sobre lo que hacía su hijo, encontrando la fatal escena: el menor colgado de un cable en una ventana.
De inmediato, vecinos del sector auxiliaron al niño de 11 años y lo trasladaron hasta las instalaciones del Hospital Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, donde intentaron reanimarlo, pero fue tarde ya que llegó sin signos vitales.
Cabe anotar que miembros de la Sijín asentados en el municipio de Uribia realizaron el levantamiento del cadáver. Sin embargo, la progenitora, quien no pertenece a la etnia wayuú, no aceptó que se le hiciera la necropsia y se llevó el cuerpo al lugar donde residía con sus dos hijos.
Igualmente, se estableció que Elis Saúl Arrieta López adelantaba sus estudios en un centro etnoeducativo de la zona rural de Uribia.