El pasado viernes 14 de marzo, en el Distrito de Riohacha se vivieron momentos trágicos para dos familias en la comuna 10, ya que dos personas fueron asesinadas en hechos violentos uno fue encontrado sin vida en el kilómetro 20 de la vía Riohacha – Cuestecitas y el otro en menos de 6 horas fue atacado a bala en el barrio Dividivi.
Es de recordar que el primer suceso se presentó la mañana del viernes en una zona rural de la capital de La Guajira, a la altura del kilómetro 20 de la vía Riohacha – Cuestecitas, en donde fue encontrado el cuerpo sin vida de Víctor Alfonso Villa Dávila, de 37 años, quien presentaba múltiples impactos de bala en su humanidad y signos de violencia.
Villa Dávila, la tarde del jueves había sido raptado desde su lugar de residencia en el barrio Dividivi, por varios hombres armados que lo subieron a la fuerza en una camioneta Renault Duster negra, modelo 2025, que tomaron un rumbo desconocido, desde ese momento sus familiares lo reportaron ante las autoridades competentes como desaparecido.
El cuerpo fue encontrado por algunos moradores de la zona que pasaron y notaron el cuerpo tendido en el suelo boca abajo en medio de un charco de sangre, de manera inmediata dieron aviso a las autoridades que llegaron hasta el lugar y a través de los miembros del Gaula de la Policía se pudo determinar que se trataba del hombre raptado. El segundo hecho violento se registró en menos de 6 horas.
Este nuevo atentando sicarial ocurrió en una residencia en la calle 75 con carrera 11B del barrio Dividivi de la comuna 10 del Distrito de Riohacha, en donde fue asesinado un joven de varios disparos que le propinó un sujeto. La víctima fue identificada como José Eduardo Mata Pacheco, de 29 años de edad, conocido por familiares y amigos como “El Chino”, hijo de un reconocido mecánico de motos en la comuna 10 de la capital de La Guajira.
Según la versión de testigos, el joven había llegado a su vivienda a buscar un poco de gasolina debido a que su motocicleta se quedó varada. En el momento en que salió, se escucharon las detonaciones de arma de fuego y al salir sus familiares observaron al joven tendido en el suelo.
Ambos casos fueron atendidos por miembros del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía seccional La Guajira, quienes adelantan las indagaciones para poder determinar los móviles de las dos muertes violentas. Hasta el momento se desconocen mayores detalles de los homicidios.