Al parecer, los antisociales violentaron la cerradura del hogar donde son atendidos los menores, entraron y se llevaron todos los elementos de la cocina.
Esta es la segunda vez que ocurre este hecho; en la primera oportunidad los sujetos cargaron hasta con las ollas.
Actualmente, el hogar no cuenta con el servicio de vigilancia por falta de recursos, lo que vuelve el sitio un foco de acciones delictivas.