Los emprendedores del naciente turismo de La Guajira han vivido un par de semanas de tranquilidad. Reconocen que han disminuido los asaltos a mano armada en las carreteras que comunican con zonas exóticas, maravillosas, a donde llegan otro tipo de visitantes que quieren ver las maravillas de la madre naturaleza.
Este fin de semana las playas de Mayapo, Manaure, Cabo de la Vela y otras regiones de la extrema Alta Guajira, se vieron invadida de visitantes. A buena hora, porque los empresarios del turismo estaban preocupados y a punto de abandonar su aventura de emprender en esta región.
Definitivamente el mayor compromiso de las autoridades, facilitaron visitar en estos momentos la ruta vial de Mayapo, El Pájaro, Mushichi, Manaure, Uribia, Cabo de la Vela. Se nota la presencia de la fuerza pública, Policía y Ejército, cumpliendo con su deber en el control de las carreteras.
Hasta hace poco viajar a esas regiones equivalía a exponerse a los atracos, robos de vehículos, tal como ocurrió con una pareja de influencers, a quienes asaltaron y despojaron de sus motocicletas, además de los equipos de trabajo.
En los últimos quince días, el gobierno departamental en cabeza del gobernador Jairo Aguilar Deluque, contando con el trabajo decidido del Secretario de Gobierno Misael Velásquez, y el concurso del Ejército, la Policía y la fiscalía, montaron a los cuadrantes en las vías, lo que inmediatamente presentó sus resultados, notándose una disminución en la comisión de los delitos en contra de los visitantes. Se ha conciliado hasta con los núcleos de familias que instalaban cada cien metros unos peajes ilícitos en donde exigían el pago de dinero para poder bajar las cintas o quitar las barricadas que colocaban. En Mayapo, por ejemplo, se notó una mayor afluencia de visitantes, hasta el punto, que uno de los restaurantes se vio obligado a cerrar las puertas, ante la avalancha de visitantes, especialmente de aquellos que iban o regresaban