Por primera vez desde que se aprobó la elección popular, cuentan los habitantes del Distrito de Riohacha con diez aspirantes a la Alcaldía para las elecciones regionales del próximo 27 de octubre.
Primero valorar la decisión de cada uno de ellos de poner a consideración de los electores su nombre, en medio de la crisis institucional y económica en que se encuentra el Distrito, que no motivaría para querer ser el próximo alcalde de la capital de La Guajira.
Sin embargo, cada uno de ellos considera que cuenta con la suficiente idoneidad para administrar a Riohacha, que no logró avanzar en este periodo de gobierno debido al caos institucional que inició en el momento que el alcalde elegido popularmente fue detenido por presuntas irregularidades en un contrato de alimentación escolar, dando como resultado que la Procuraduría General de la Nación lo suspendiera para seguir en el ejercicio del cargo.
Es entonces necesario que los candidatos sigan compartiendo su programa de gobierno con la comunidad, para que el elector pueda contar con los suficientes elementos para votar de manera consciente.
Los electores también deben interesarse por conocer quiénes son, qué representan cada uno de los aspirantes y qué están proponiendo para resolver problemas comunes como la inseguridad, la invasión del espacio público, el caos vehicular, la migración, el desempleo, el analfabetismo y otros que no permiten que el Distrito avance en su desarrollo social y económico.
La comunidad tiene la palabra porque para fortuna son 10 personas que manejan distintas disciplinas, algunos con más experiencia administrativa que otros, otros con una mayor formación académica, con propuestas diferentes de cómo abordar los problemas de la ciudad, con arraigos y sentimientos distintos, sin asomo de ninguna inhabilidad, hijos de respetables familias, pero solo uno será el elegido y esa decisión corresponde al elector, quien debe asumir de manera responsable ese voto porque se trata de escoger al que realmente responda con argumentos cuál es el camino a seguir para salir de la crisis en que se debate el Distrito.