Lentamente y de una manera silenciosa, eclipsada la pandemia por la invasión de Ucrania y otros acontecimientos de la política internacional, los contagios por coronavirus vuelven a subir en buena parte de los países europeos, aunque en la mayoría son casos que no se corresponden con un aumento de las hospitalizaciones.
En Alemania se han superado por primera vez los 1.600 nuevos contagios cada cien mil habitantes, Italia registró este martes más de 85.000 nuevos casos, en Francia se prevé un pico de 120.000 a 150.000 nuevos casos diarios para finales de marzo y en Austria se han disparado los contagios con el levantamiento de restricciones.
Pero en cambio, salvo el caso alemán, se prevé que las medidas restrictivas vayan desapareciendo.
Y en otras partes del mundo, los casos vinculados a China y otros países de Asia han provocado que la curva global de contagios semanales de Covid vuelva a subir, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El peligro es que se «banalice la pandemia«, que «no ha terminado«, dice el Consejo científico que aconseja al Gobierno francés.