La Procuraduría General de la Nación decidió suspender e inhabilitar por 14 años y un mes al capitán de la Policía Eduardo Andrés Merchán Priego, luego de una investigación en la que era acusado de acceder carnalmente y de manera violenta a una subalterna.
Estos hechos salieron a luz pública mediante un audio en la que la víctima hacía la denuncia, narrando la violación que se registró durante una fiesta de despedida en Valledupar (Cesar), el 24 de noviembre de 2018.
En el fallo de primera instancia, la Procuraduría dejó claro que las pruebas recaudadas permitieron determinar que el disciplinado, quien para esa época se desempeñaba como comandante de Policía en el municipio de Curumaní, Cesar, «obligó a la teniente a tener una relación íntima, la cual no fue consentida y por el contrario se trató de una violación».
Asimismo, explicó que calificó la conducta del uniformado como una falta gravísima a título de dolo y precisó que el fallo fue apelado por la defensa del uniformado.