Esta semana comenzaron a movilizar desde Puerto Brisa hasta la Alta Guajira, las hélices y los aerogeneradores que llegaron al Departamento el pasado mes de junio, para la instalación del proyecto eólico Guajira I, de la empresa Isagén.
Así ha quedado evidenciado en fotografías y videos de los camiones transportando todos los elementos por los caminos de La Guajira.
El Parque Eólico Guajira I se construirá en el corregimiento del Cabo de La Vela. El proyecto contará con 10 aerogeneradores, en un área de 5,5 hectáreas, con una capacidad instalada de 20 megavatios, lo que equivale al consumo de 33.295 familias colombianas.
Según el Gobierno nacional, este proyecto generará inversiones por $75.000 millones de pesos y más de 50 empleos, e impulsará el desarrollo económico y social, y la reactivación sostenible de La Guajira y el país.
Sin embargo, desde su anuncio, líderes indígenas han mostrado su desacuerdo con la instalación de los aerogeneradores, aduciendo que además de generar impacto negativo en la avifauna y el turismo, pone en riesgo la vida de las comunidades indígenas.
Sobre esto último, el líder Saúl Carrillo afirmó que este es un tema debe preocupar no solo a la población wayuú, sino a todos los guajiros.
“Ese es un tema que preocupa hoy a las comunidades wayuú pero no debería preocuparle solamente a ellos, puesto que esto no va afectar únicamente al territorio donde se van a instalar los aeronavegadores, sino que va a afectar a todo el Departamento, de norte a sur, porque también van a construir una línea de conducción donde van a sacar toda esa energía eólica para llevarla al interior del país y eso va a impactar a todo el territorio”, dijo.
Señaló que, al día de hoy, no se tiene claro cuáles son las garantías que va a tener el Departamento, con la instalación del parque eólico.
“Hoy nosotros vemos esos camiones gigantes que están entrando a instalar unos molinos eólicos, pero La Guajira no sabe y no tiene claro cuáles son las garantías que va a tener el Departamento hablando en temas de contraprestaciones que deben llegar por la instalación y explotación de esta riqueza natural”.
Además, señaló que La Guajira no sabe cuánto va a ser el recurso que van a generar esos parques eólicos o qué le corresponde al Departamento y a las comunidades wayuú, que también ha sido vulnerada en el derecho a la consulta.
“(…) porque si bien el Gobierno manifiesta que se hizo una consulta, es posible que la hayan hecho con 4 y 5 comunidades de una comunidad indígena en el norte del Departamento, donde se van a instalar los molinos, pero por el resto de comunidades por donde van a atravesar esa línea de conducción no lo han consultado”.
De hecho, aseguró, aún no se sabe cuál va a ser el impacto ambiental que va a generar el parque.
“Hace unos días estaba con un delegado de Corpoguajira y no nos decía eso, lo contrario, se dedicó a hablar de cuántos pajaritos, murciélagos podrían morir, y nos hablaba entonces de los pájaros que tienen un camino distinto a donde se van a instalar los molinos. Necesitamos que hablen claro, decirle a La Guajira cuántos indígenas van a morir por la fuerza de energía en el Departamento y la extracción de rayos”.
Carrillo dejó claro se reunirán el próximo lunes con funcionarios del Gobierno nacional, para analizar el tema.
“Se supone que van a estar 4 viceministros pero necesitamos que La Guajira revise, que los diputados o representantes y el gobernador, le diga al Departamento qué es lo que están pensando y qué es lo que están haciendo. El fin es que se organice primero un protocolo de consulta para el Departamento, que pueda garantizarle a las comunidades los derechos que se van a consignar en beneficio de nuestra gente y nuestro departamento”.
Guajira I es el segundo parque eólico que se va a desarrollar en Colombia tras la construcción de Jepírachi, que entró en operación en abril de 2004. Con este proyecto, el gobierno colombiano retoma su apuesta por la energía eólica.