Luego de la liberación del exdiputado opositor Leopoldo López en la madrugada, se vive un clima de tensión en las calles de Caracas (Venezuela), tras el anuncio de una sublevación militar contra el presidente del país, Nicolás Maduro.
Esta nueva coyuntura política comenzó cuando el presidente interino, Juan Guaidó, declaró desde la base militar La Carlota que al menos una parte de las fuerzas armadas se unieron a la llamada ‘Operación Libertad’ para alcanzar el cambio de gobierno. Además el dirigente opositor llamó a los ciudadanos a salir a las calles a marchar contra la administración.
Con el pasar de las horas, cientos de personas salieron de sus casas y oficinas en dirección al Palacio de Miraflores para manifestarse contra Nicolás Maduro.
Ante estos hechos, los funcionarios del gobierno chavista declararon en medios de comunicación que las fuerzas militares siguen siendo leales a Maduro y que solo un grupo reducido de uniformados decidió unirse a Juan Guaidó.
«¡Nervios de Acero! He conversado con los Comandantes de todas las REDI y ZODI del País, quienes me han manifestado su total lealtad al Pueblo, a la Constitución y a la Patria. Llamo a la máxima movilización popular para asegurar la victoria de la Paz. ¡Venceremos!», declaró en Twitter Nicolás Maduro.
Por su parte el ministro de Defensa, Vladimir Padrino, asegura que más del 80% de los militares que participan en la sublevación han sido «engañados» por la oposición. Además el alto oficial califica los sucedido como un «intento de golpe de estado».
Mientras el ministro de Comunicaciones, Jorge Rodríguez, también rechazó las acciones de la oposición y llamó a los seguidores de Nicolás Maduro a concentrarse en Miraflores para defender al mandatario.
Pese a los llamados a la calma desde el oficialismo, en Caracas se libran disturbios entre manifestantes opositores y fuerzas de seguridad leales al régimen.