El Gobierno Nacional ha llamado al Congreso de la República a sesiones extraordinarias entre el 17 y el 19 de diciembre, según lo estipula un decreto oficial. El principal objetivo de esta convocatoria es destrabar el debate sobre la reforma a la salud, una de las apuestas más importantes del presidente Gustavo Petro, que enfrenta un panorama legislativo adverso.
Esta reforma, que ya había sido archivada en un periodo legislativo anterior, fue modificada con la intención de superar los múltiples obstáculos encontrados en el Congreso. Sin embargo, el apoyo a la iniciativa ha disminuido, incluso dentro de sectores tradicionalmente aliados al Ejecutivo.
Durante las sesiones ordinarias, el avance fue limitado, ya que el debate se centró en resolver impedimentos, sin llegar al análisis de fondo del articulado. Según el ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, las sesiones extraordinarias permitirán iniciar esta discusión.
“La próxima sesión se terminarán los impedimentos y se inicia la discusión. Vamos a tener no solamente el día 16, que es el último día de legislación, sino que vamos a tener cuatro días más, hasta el 20 de diciembre”, declaró Jaramillo.
La convocatoria a sesiones extraordinarias llega tras un cierre legislativo difícil para el Gobierno. La reciente derrota de la Ley de Financiamiento, clave para garantizar los recursos del presupuesto de 2025, marcó un revés significativo para el Ejecutivo.
Conocida también como reforma tributaria, esta iniciativa buscaba fortalecer las finanzas públicas, pero no logró sortear las divisiones políticas en el Congreso. Su hundimiento generó fuertes críticas del presidente Petro hacia las bancadas, en un contexto de tensiones y falta de consensos que ahora amenaza con complicar aún más la aprobación de la reforma a la salud.
El Gobierno apuesta a que estas sesiones extraordinarias permitan recuperar terreno en su agenda legislativa, aunque las fracturas en la coalición oficialista y el rechazo de la oposición mantienen el desenlace en el aire.