El Congreso y el presidente de la República, Gustavo Petro, cumplen dos años, del periodo constitucional de cuatro años, 1461 días, cuyo término es factible, para valorar y calificar: gestiones, acciones, operaciones y resultados parciales; Legislativo y Ejecutivo, encabeza del presidente. El tiempo corre y no da espera, durante las 24 horas, de cada día, por eso debe aprovecharse, para planificar programas, calcular presupuestos y términos, duración, de proyectos que se direccion en a ejecuciones, al igual que las aprobaciones de leyes tramitadas, previas concertaciones partidistas, en la Cámara de Representante y Senado.
Gobernar es una mezcla de factores y elementos, inherentes a conformación de equipos humanos, que diseñen, planifiquen, proyecten y emprendan; acciones y operaciones, clasificadas, para ejercicio de labores, técnicas, profesionales, amparadas en acreditaciones de calidad, experiencia, libre de anotaciones y registros penales y disciplinarios; que garanticen confianza, credibilidad y efectividad positivas.
Manejar filtros en la escogencia de colaboradores para una Administración de Gobierno popular: nacional, departamental y municipal; no es nada fácil, por inoperativo, sujetado a series de compromisos, originados por aportes económicos retributivos, en campañas políticas, cuyos financiadores, exigen cuotas burocráticas, para participar en el gabinete de Gobernó, en condiciones de ministros, secretarios, directores entre otros. El mandatario tienen la batuta, para armonizar y coordinar, el buen ambiente que permitan, se articulen: direccionamiento, sincronizados; con libretos y guiones; facilitando medios y aprovechamientos oportunos y necesarios para consumar proyectos y programas, los cuales deben arrojar resultado de valoración y calificación.
El mandatario debe estar conectado y sintonizado con su equipo de trabajo, comunicando y atendiendo correspondencias, subgerencias, observaciones y peticiones; que se formulen para bien de la Administración y fortalecimiento, en estabilidad administrativa. Desligarse de sus cooperadores, para esforzarse en unas cosas, desatendiendo otras pendientes de soluciones, es despreciar oportunidad de servir de un Gobierno, que lo conforma, no solo la persona del mandatario, sino también el grupo de personas que lo integran.
Han transcurrido dos de los cuatros años de un periodo de presidentes y congresistas, sobre los cuales deberían rendir cuentas de lo que han gestionado, hechos y logros o que se iniciaron y están pendiente de materializarse durante los periodos legislativos. Lo que se observa ha sido confrontaciones del Gobierno con partidos de oposición y negativas, aprobación en el Congreso de algunos proyectos relacionados con reformas.
El cambio esperado del Gobierno de presidente Gustavo Petro, se han opacado por los escándalos originados a causa de corrupción que prometió erradicar pero sigue estándar, vivita y coleando, implicando a muchos que pregonaban un Gobierno del Cambio. La corrupción es una cultura enquistada en el sistema politiquero y de administraciones publicas que operan con partidos de papel, cuestionado por inservibles y perversos que comercializan los votos para aprobar las leyes en uso de una democracia disfrazadas de mercantilismo que persigue beneficios personales, familiares y migajas, a sus seguidores.
Tanto la derecha como la izquierda están contaminados e implicados de corrupción, es decir están pringados, aún cuando muchos hipócritamente lo nieguen y ofendan a pares y similares, cuando se trata de una práctica común cuestionable que compromete de punta a punta a las bancadas políticas que subsisten en el juego del clientelismo politiquero con la compra-venta de votos.
Cuando se pierde la confianza y la credibilidad, en mandatarios o gobernantes, de una u otra, tendencia política que repiten, ofenden y critican, atribuyendo a otros el mal que también lo afecta e implica, carcomiendo nuestra sociedad cuando mutuamente están comprometidos para desgracia de quienes habitamos el territorio nacional bajo el dominio predominante de la corrupción, que nos tiene hasta la coronilla porque gozan del consentimiento y aval de autoridades administrativas judiciales, penales y demás servidores públicos.
El deseo de ser presidente le cuajó Gustavo Petro, lo conquistó en una ocasión de oportunidad de elección popular en uso de una estrategia y la creación de un acuerdo denominada ‘Pacto Histórico’, plasmado en una alianza de izquierda, centro, verdes, liberales, indígenas, negritudes e independiente; con el objeto de conformar una lista al Senado de representación tutifruti cerrada, logrando elegir 20 senadores.
Tuvieron éxito en ocupar el primer lugar en elección del Senado y consecutivamente, en primera y segunda vuelta presidencial, donde Gustavo Petro obtuvo la credencial de presidente. ¿Cuál es el objetivo o la función, misión o gestión del ‘Pacto Histórico’? ¿Quiénes conforman el comité directivo? Los recientes resultados electorales, de Concejo, Asamblea, alcaldías y gobernaciones; fueron desastrosos en el ‘Pacto Histórico’ por falta de organización, direccionamiento, conexión, comunicación y cohesión; para el manejo político electoral.
Quedan dos años para concluir el periodo que gira en olas desbalanceado, sin que se haya logrado la paz con organizaciones armadas al margen de la ley a quienes el presidente Petro le ofreció y facilitó la oportunidad de acogerse a la paz y desarmarse, pero los carteles, bacrines, guerrilla y paramilitarismo; aceptan los diálogos sin renunciar al negocio del narcotráfico, minería ilegal, extorciones, predominio territorial, reclutamiento de menores, secuestros y atentado contra la fuerza pública; entre otros. Sin condiciones ni controles, ¿Que gracia tiene perder tanto tiempo, negociando un proceso de paz cuando se persisten acciones delictivas que viola la seguridad y generan: zozobras, angustias, sosiegos y tormentas mentales, originada del pánico que se vive con reacciones tardías para repelerlos.
Los bloqueos de vías y espacio público, al igual que los cambios acelerados de ministros son factores negativos e improductivos. Comprendiendo motivos de improvisación selección de colaborades, en dependencia del Gobierno, que no logran empatizar y conjugar, criterios de entendimientos y emprendimientos; propuesto por el Gobierno. El presidente ha descuidado atenciones e incumplimiento de horarios no han dejado de de exaltar los escándalos de familia, Gobierno y fuertes confrontaciones con los opositores que cuestionan y critican, lo que siempre han hecho, influenciado por corrupción, pero en el Gobierno también se repiten prácticas, que antes cuestionaba de Gobierno sustituido. ¿Cuál es la diferencia?
Presidente Petro, aproveche la mitad de su periodo de Gobierno, ejemplarizando, concertaciones de acuerdos, con participación incluyentes, conciliando diferencias con la oposición sacar adelantes muchas reformas que se requieren y consolidar fortaleza política y social, contra la inseguridad y la violencia, que mitigue o amortigüe el miedo. De nada sirve confrontaciones, discusiones y aclaraciones; con perseguidores, ni detenerse a lanzar piedra, a los perros que le ladran o cuestionan sin motivos, ni fundamentos. Estamos bandeados por la inseguridad y estancamientos cerrados en avaricias y defensas, de intereses, particulares personales, aferrados en practicas de corrupción, que carcome y destruye todo lo que contamina sin proyecciones de emprendimiento y en crecimiento de necesidades y problemas.