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“Escribo por el placer que me da hacerlo, con la libertad para decir lo que pienso, sin cálculo distinto a ser objetivo y respetando al lector y la opinión diversa”, El autor.
Mejor que construir un tren aéreo entre Buenaventura y Barranquilla sería un acueducto aéreo para La Guajira que acabe de una vez y para siempre con el problema de la falta de agua que ha cobrado tantas vidas humanas y enriquecido a unos pocos a costa de la necesidad del vital líquido, con sus negocios de carrotanques, construcción de pozos profundos y acueductos convertidos en elefantes blancos.
El acueducto aéreo será el primero en el mundo, no necesitará de tuberías ni de motobombas para impulsar el agua y permitirá que todos los días del año llueva sobre La Guajira para que nunca más nadie muera por falta de agua.
El acueducto funcionará calentando el agua del océano hasta que se evapore y llenen con millones de metros cúbicos de agua tres gigantescas nubes en el espacio aéreo de La Guajira, que después caerán como diluvio universal bañando la tierra guajira. Una nube estará ubicada en la zona norte, la otra en el centro y otra en el sur del Departamento. Cada nube tendrá una compuerta que se abrirá cuando estén cargadas de agua y soltarán tremendos aguaceros sobre cada zona del Departamento que necesite de agua.
Un centro de monitoreo desde tierra controlará remotamente el cierre y apertura de las compuertas de las nubes, regulando la intensidad del aguacero, la duración de la lluvia y temperatura del agua. Podrá controlarse que llueva más fuerte o suave según se requiera; con o sin brisa, o que el agua caiga granizada o saborizada a whisky; la duración de la lluvia y ésta caiga fría o caliente según llueva de día o noche.
Caerá tanta agua sobre La Guajira que el suelo se volverá fértil para toda clase de cosecha, convirtiendo al Departamento en una potencia mundial de alimentos. Con agua abundante caída del cielo como maná, los chivos, vacas y animales engordarán aumentando de peso y La Guajira tendrá suficiente carne para exportar; los campesinos ganarán más plata con la venta de sus productos.
A los políticos se les acabará la teta con la construcción de acueductos que no se necesitarán; el acueducto aéreo nos surtirá de agua todos los días y los niños Wayuú no padecerán más sed ni morirán por falta de agua. El agua del acueducto aéreo vendrá purificada 100% natural y la gente que tomaba agua de pozo ya no se enfermará más, ni sufrirá de diarrea.
Para lograr que el agua del mar se evapore rápido y suba hasta las nubes la calentamos con energía solar generada por miles de paneles instalados en una gran isla artificial construida en el mar y, a la vez, se suministrará energía gratis a todos los municipios del Departamento, acabando con el abuso contra los usuarios que comete la empresa operadora del servicio de energía en La Guajira.
El acueducto aéreo de La Guajira será el primero que se construya en el mundo, y servirá como piloto para que otros países lo construyan sobre sus territorios. Estos acueductos harán posible que haya agua en zonas desérticas para convertirlas en tierra fértil para la agricultura, disminuyendo la hambruna mundial pues será más barato producir comida.
Con el acueducto aéreo La Guajira mejorará sus índices de desarrollo y saldrá del vergonzoso penúltimo lugar NBI, dando el gran salto de calidad hacia el desarrollo como el Departamento que más agua y energía tiene, y esto traerá progreso, inversión social y bienestar para su gente.
Es más viable construir el acueducto aéreo en La Guajira que el tren aéreo Buenaventura-Barranquilla, porque aquí lo que sobra es agua para que llueva naturalmente y sol para generar energía renovable, garantizando el derecho a la vida y un ambiente sostenible sin dañar el ecosistema del Pacifico y la selva chocoana.
El acueducto aéreo solucionará definitivamente el problema de la escasez de agua en La Guajira que dejó miles de niños muertos. Ahora La Guajira será tierra abonada para la vida, y los 40 carrotanques comprados para llevar agua a las comunidades, serán un mal recuerdo de improvisación e ineficiencia. Colorín colorado, cuento acabado.