Con el fin de avanzar hacia el eficiente ordenamiento del suelo en departamento de La Guajira, la Gobernación del Departamento con el acompañamiento de la Unidad de Planificación Rural Agropecuaria –Upra–, adelantaron el ejercicio de evaluación de tierras y zonificación de aptitud de los tipos de utilización de tierra para la región.
A través del análisis que se realizó en ejercicio conjunto con los entes territoriales, gremios de producción y diferentes actores de distintos ámbitos del ordenamiento territorial, la Upra hizo entrega de los mapas que presentan 28 sistemas productivos priorizados, de los cuales 16 son objeto de evaluación de tierras. En estos se destacan zonas aptas como acuicultura, ahuyama, banano orgánico, bovinos, cacao, café, caprinos, fique, fríjol, maíz, melón, ovinos, patilla, pesca, plátano y yuca.
Los resultados son importantes para el desarrollo económico de la región, ya que a partir de hoy, la región de La Guajira cuenta con información clave para orientar la planificación y el ordenamiento productivo agropecuario del territorio, además de un punto de partida para elaborar el análisis financiero de las alternativas priorizadas (costos de producción) y, asimismo, un insumo básico para la formulación de planes de ordenamiento departamental –POD–, planes integrales de desarrollo agropecuario y rural con enfoque territorial –Pidaret– y los planes departamentales de extensión agropecuaria –Pdea–, entre otros instrumentos de planificación territorial.
Felipe Fonseca Fino, director general de la Upra, explicó que “la evaluación de tierras entregada a la Gobernación de La Guajira es la hoja de ruta para el Plan de Ordenamiento Departamental de la región, con fines agropecuarios para la gestión de usos en asuntos que tienen que ver con la ordenación del campo y actividades eficientes y sostenibles”.
La evaluación de tierras es un proceso analítico que establece el desempeño del suelo para un uso específico existente en una zona determinada. Tiene por objetivo, proponer y determinar espacialmente sistemas de uso que sean apropiados, en sentido biofísico; aceptables, desde el punto de vista social; viables, en términos económicos, y que no ocasionen impactos negativos en el medio ambiente, es decir, que sean sostenibles a largo plazo.
En este sentido, Alberto Ariza, gobernador (e), puntualizó que “con la alianza establecida con la Upra el Departamento tiene la oportunidad de tener un diagnóstico real sobre la vocación productiva de los municipios y así poder articular acciones a través de los programas del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural encaminados al encadenamiento productivo para el territorio”.