Con torta, globos y hasta piñata, líderes comunales, concejales, deportistas y comunidad en general de Maicao, celebraron a manera de protesta los nueve años del inicio de las obras de reparación y adecuación del estadio Hernando René Urrea Acosta, las cuales aún no han culminado.
José Galindo, uno de los autores de la iniciativa, aseguró que “lo que pedimos es simple, lo primero es manifestar nuestra inconformidad con el incumplimiento de la obra y exigir la culminación de la misma con los parámetros técnicos y legales, protestar de una manera pacífica a ver si logramos llamar la atención, el dinero que se ha invertido en esa obra es mucho y aún Maicao no cuenta con el escenario deportivo culminado”.
Además señaló que han solicitado el monto de la inversión pero aún no lo entregan, “sabemos que el inicial fue de 5.400 millones y en el gobierno de José María Ballesteros anunció $1.500 millones, de igual manera tenemos conocimiento de otras inversiones adicionales, a esto hay que sumarle lo que se debe invertir para reparar la cubierta”, dijo Galindo Amaya.
Por su parte, Liceth Carolina Urieta, única concejal que acompañó a los manifestantes, aseveró que en el municipio se está volviendo costumbre que las obras las empiecen y no las terminen, “nos estamos convirtiendo en un asidero de elefantes blancos por obras que suspenden indefinidamente y cuando deciden retomarlas ya la inversión inicial prácticamente esta pérdida convirtiéndose en detrimento patrimonial para el municipio”, anotó.
A su vez, el exalcalde Jarlen Garrido Weber precisó que la intención es llamar la atención de los organismos de control tanto Procuraduría y Contraloría, así como la población en general, sobre el lamentable estado en el que se encuentran las obras.
“Luego de nueve años de haber iniciado las primeras inversiones. Han pasado 8 gobernadores y el deterioro del Hernando René es evidente, sobre todo de una obra que tiene millonarias inversiones, un detrimento patrimonial evidente y sin tener aún un escenario deportivo terminado”, apuntó.
Se conoció que la veeduría de la obra aclaró que los arreglos de la cubierta levantada por las fuertes brisas no hacen parte de esta segunda etapa del estadio; las obras incluidas en esta nueva fase son el cerramiento del estadio, baterías sanitarias, adecuación del campo de juego con siembra de grama natural, sistema de riego de la grama, adecuación y habilitación del pozo profundo ubicado frente al coliseo cubierto y su respectiva bomba sumergible, además de pista atlética con faltante del acabado final e iluminación.