“La mujer mala y bonita tiene pacto con el demonio”: Isaac Carrillo, canción
‘Las mujeres’.
Es indiscutible que las letras de las canciones vallenatas han contribuido grandemente al rescate de la tradición oral de la región, y han contribuido a visibilizar el caudal de textos, paratextos, dichos y asertos campechanos que desde que nacimos han estado disponibles para facilitar la comunicación con nuestros semejantes imprimiéndole gracia y claridad a todo lo que se quiere expresar e imprime inmediatez a la comunicación y la información, es un aporte silencioso pero efectivo para entender que el vallenato no solo contribuye a la industria del espectáculo, sino que desde la perspectiva idiomática es rico en expresiones que divierten y facilitan el aprendizaje, y transmiten enseñanzas a las actuales y las venideras generaciones y reafirman nuestra autenticidad, aquí tenemos botones de muestra.
Para significar que la muerte por ser decisión de Dios no importa a donde nos sorprenda, en la canción elegia ‘Alicia adorada’, Juancho Polo dijo que “Donde quiera que uno muere, todas las tierras son benditas”, Héctor Zuleta en un juego de palabras en la canción ‘Volverás’ que grabó con Adaníes y está en el LP ‘Pico y espuela’ lanzado en 1981 dijo que “Quien se viste con lo ajeno lo desvisten en lo bueno, quien da pan a perro ajeno pierde el pan y pierde el perro”.
Leandro Díaz en la canción titulada ‘Mi memoria’, que le grabaron en el LP ‘Dos grandes’, en 1978, Diomedes y ‘Colacho’, nos recordó que “Natural es aquella persona que sin estudio también se defiende”. Romualdo Brito, en la canción ‘Con la misma vaina’, que está en el álbum ‘Muchas gracias’, de Diomedes con Iván dijo que “El hombre es el que trabaja, la que manda es la mujer, tiene un haz bajo la falda que no la deja perder”.
Calixto Ochoa en la canción ‘El esqueleto’, con su acordeón y su voz en el LP ‘Rey de Reyes’, en 1970, y después fue reeditada por Diomedes e Iván en el LP ‘Volver a vivir’, en 1998, reflexionó existencialmente para decir que “Se acaba la vida, se acaba el misterio cuando uno se muere ya no vale na, allí vale igual el pobre pordiosero que el más ilustrado de la sociedad”. El mismo Calixto en su canción ‘Los cambios del tiempo’, que incluyeron Los Hermanos Zuleta en el LP ‘Mañanitas de invierno’, en 1993, sostuvo que “No hay época más bella que la vida infantil, porque el niño tan solo piensa en jugar, comer y dormir”.
Rafael Valencia en la canción ‘La caja negra’ que le grabaron Enrique Diaz, Luis Enrique Martínez y ‘Poncho’ Zuleta con ‘El Chiche’, aconseja que “El hombre que trabaja y bebe déjenlo gozar la vida porque eso es lo que se lleva si tarde o temprano muere”.
Diomedes en el LP ‘El mundo’, con ‘Colacho’, que salió en 1984 en su canción ‘Mi muchacho’, expresa sus buenos deseos para su vástago diciéndole que “Si le inspira ser zapatero solo quiere que sea el mejor, porque de nada sirve el doctor si es el ejemplo malo del pueblo”. Agrega que “La vida es un baile que con el tiempo damos la vuelta”, y remato recordando que “En la vida hay cosas del alma que valen más que el dinero”.
Carlos Huertas en su canción ‘La casa’, en el LP ‘Ídolos’, que Los Hermanos Zuleta pusieron a disposición del público en el mes de noviembre de 1976 dijo que “El anillo ya no hace falta, no solo el matrimonio es felicidad”.
Rafael Escalona en la canción ‘Compadre Tomás’ que está en el LP ‘Fuera de concurso’, de Los Hermanos López y Jorge Oñate que salió en 1974 dijo que “En asunto de mujeres se equivoca hasta el sabio Salomón”.
En la canción ‘Por jugar al amor’ que incluyeron Los Betos en el LP ‘Parrandas inolvidables’, en 1985, dijo Marciano Martínez que “El que dice lo que quiere, le toca escuchar lo que no quiere”, y agregó: “El que persigue placeres se choca después de haber deshojado las rosas con un camino de espinas”, “El que cultiva engaños recoge traición que quien juega con amor hasta su amor olvida, Dios tarda, pero no olvida”. Remató advirtiendo “Al que pega se le olvida y quien recuerda es el de la ofensa recibida”.
Emilianito Zuleta en la canción ‘La Virgen del Carmen’, que dio a conocer con la voz de su hermano en el LP ‘Tierra de Cantores’, en 1978, dijo que “No hay cosa más bonita que sentirse uno con fe”, en su canción ‘Dios lo sabe’, que incluyeron Los Hermanos Zuleta en el LP ‘Mi acordeón’, en 1985, dijo ‘Rafa¡ Manjarrez que “No hay pelea buscada que no se pierda” y que “Unos comen piña entera y a otros les da dentera”. El mismo epónimo hijo de de La Jagua del Pilar en la canción ‘En la tierra mía’, que le grabaron Silvio y ‘Colacho’ en el año 1985 sentencio que “En la valla manda es el que tenga cría”.
Amílcar Calderón en su canción titulada ‘Volví a llorar’, que le grabo Jorge Oñate con Alvarito en el LP ‘El folclor se viste de gala’, que salió el 24 de noviembre de 1988, puso de presente una cruda realidad, que “Al guajiro, hasta la muerte le llega tarde”.
En la canción ‘El milagro’, que le grabaron Emilio Oviedo y Beto Zabaleta el viejo Emiliano dejó claro que “No hay cosa en la vida que no tenga su final”. Esa obra musical está en el LP ‘Recordaciones’ que salió en 1976. En la misma producción musical vino ‘Las solteras’ de la autoría de Sergio Moya Molina. Dice algo indiscutible, que “Vale más pájaro en mano que ver un ciento en el aire”. Y además dice que “Mientras más resabios guarden más viejas se van poniendo”.
En la canción ‘La chivolera’, que Los Hermanos Zuleta incluyeron en 1977 en el LP ‘El cóndor legendario’, su autor Lino J. Anaya dijo que “Así como el torero muere en su profesión, un hombre mujeriego debe morir de amor”. El mismo compositor en la canción ‘Pasto biche’, que está en el LP ‘Silencio’, la última producción musical de El Ruiseñor del Cesar y ‘Colacho’ que salió en 1977 aconseja a sus amigos lo siguiente: “Tomen la vida con calma, búsquense una mujer nueva, dejen la vieja en reserva por si acaso alguna vaina”. Les advierte también que “Con la mujer hay que hacer lo mismo que con los carros, cambiarlos cada dos años para que trabajen bien” porque “si lo deja envejecer vive el chofer contrariado y un hombre malhumorado no puede manejar bien”, y remata con esta recomendación: “Búscate una mujer nueva, pa’ buey viejo, pasto biche”.