Nueve personas fueron capturadas por las autoridades colombianas, señaladas de integrar una red delincuencial dedicada a la extracción ilegal de madera en áreas protegidas de la Amazonía.
Según informó la Fiscalía General de la Nación, el material forestal era almacenado en centros de acopio ubicados en Putumayo y Nariño, y posteriormente distribuido hacia Bogotá, Cali, Medellín y varias ciudades de Ecuador.
Las investigaciones permitieron establecer que los capturados comercializaban madera proveniente de parques nacionales naturales y zonas de reserva forestal, sin contar con los respectivos salvoconductos. Durante diligencias judiciales adelantadas en conjunto con los Carabineros de la Policía Nacional, fueron hallados 100 metros cúbicos de especies protegidas, listos para su venta ilegal.
Un fiscal de la Dirección Especializada para los Delitos contra los Recursos Naturales y el Medio Ambiente imputó a los señalados el delito de aprovechamiento ilícito de recursos naturales renovables, el cual no fue aceptado por los procesados. Todos fueron presentados ante un juez de control de garantías.
Este caso se da en un contexto alarmante: según cifras del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, la deforestación en Colombia alcanzó las 107.000 hectáreas durante 2024, lo que representa un incremento del 35% respecto al año anterior.