Por su parte, el concejal de la ciudad de Barranquilla, Estefanel Gutiérrez, expresó su inconformismo y aseguró que, «el bienestar familiar debe restablecer los derechos de los niños instrumentalizados«, y aseveró que «en algunos casos están siendo dopados y tenemos entendido que estos niños llegan en vehículos para luego ser utilizados por los adultos».
Finalmente el concejal afirmó que, «hay una presunta explotación laboral y sexual, los niños de estos pueblos indígenas Yukpa en su diario vivir, se enfrentan a la mendicidad infantil en el norte de Barranquilla».
Según cifras reveladas por el Dane, el flagelo de la mendicidad infantil en la capital del Atlántico, ha venido bajando del 1,83% al 0.8% en el año 2024, sin embargo, hoy se presenta este tipo de casos entre los niños indígenas migrantes de Venezuela.
El número de la denuncia que reposa en las instalaciones del Instituto de Bienestar Familiar, seccional Atlántico, es el 1764323973, según funcionaria del call center del ICBF, la encargada del caso es la Defensora de Familia Diana Milena Zúñiga, RCN Radio intentó comunicarse con la persona encargada del caso, pero no obtuvo respuesta.