Por segunda vez esta semana, la movilidad en Barranquilla y sus municipios vecinos colapsó por cuenta de otro paro de conductores de las rutas de buses colectivos, que están protestando contra los hechos de violencia de los que vienen siendo víctima en las últimas semanas.
La calle Murillo, la avenida Circunvalar, la calle 30, entre otras vías de gran importancia en la ciudad, fueron bloqueadas desde horas de la mañana por los transportistas, que le están exigiendo a la Policía y al alcalde Jaime Pumarejo mayores resultados contra la delincuencia.
El bloqueo también afectó la operación de Transmetro, que antes del mediodía tuvo que suspender la circulación de todas sus rutas. En videos que circulan por redes sociales se aprecia que a uno de los buses de Transmetro le pincharon las llantas.
La misma suerte corrieron los buses de algunas empresas que no se unieron al paro.
La parálisis del transporte también tiene a cientos de personas represadas en el aeropuerto Ernesto Cortisoz y el Terminal de Transporte Metropolitano, ubicados ambos en Soledad. Algunos viajeros tampoco han podido llegar a esos sitios para tomar sus buses o aviones hacia otras ciudades.
Así se ha desarrollado el paro de conductores en Barranquilla: