Un sistema de tormentas de rápido impacto o aire ártico que se desplaza por el Atlántico Medio y partes del noreste de Estados Unidos mantiene en alerta a más de 100 millones de personas.
Se trata de la tormenta invernal Indigo que concluiría este viernes pero que dejó a su paso por norteamérica lluvias de nieve, estados como Delaware y ciudades como Cincinnati, Pittsburgh, Washington, D.C., Baltimore, Filadelfia y Nueva York totalmente cubiertas y la parálisis de la vida cotidiana de los estadounidenses.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó que durante este fin de semana habrá otro brote en gran parte del centro y este de Estados Unidos, que no será tan gélido como el anterior que se registró a comienzos de semana. Aunque «las temperaturas y el viento helado seguirán siendo peligrosos en gran parte del país» y las temperaturas alcanzarán los 17 grados bajo cero.
En el oeste, las advertencias de avalanchas han sido canceladas en Colorado, tras varios días de condiciones peligrosas en las laderas de las montañas. Las condiciones parecen mejorar ligeramente de cara al fin de semana.
Mientras tanto, en el noroeste del Pacífico, la nieve se convertirá en aguanieve y lluvia helada en partes de Washington y Oregón lo que puede provocar carreteras resbaladizas y viajes peligrosos.
Como consecuencia de las condiciones meteorológicas, al menos 778 vuelos han sido cancelados este viernes con origen o destino Estados Unidos, mientras que 1.637 sufrieron retrasos.
Los aeropuertos de La Guardia, en Nueva York, y el Reagan National de Washington DC están siendo los más afectados.
Con información de EFE